Espectáculos El extraño cambio de Juana Molina: "Hoy lo raro se volvió hermoso" La actriz y cantante mostró otra faceta de su carrera. A los 51 años, elogia "el linyerismo" y abre su casa a la nueva vida. "No me importa ser un zaparrastro", dice. Juana Molina es una artista distinta al resto. Actriz multifacética, cantante de discografía abundante y una persona con un pensamiento tan heterodoxo como singular. A los 51 años decidió hacer otro cambio en su vida y, ahora dice, abraza el "linyerismo".
"Yo preferiría, como todo el mundo, ser una mujer muy hermosa que no necesite nada", afirma Juana en diálogo con la revista Siete Días. "En mi adolescencia eras fea y chau, no existía la posibilidad de ser linda de otra manera. Tenías que ser linda-linda para que te fuera bien", afirmó.
"A mí no me importa ser un zaparrastro siempre y cuando el zaparrastro tenga una armonía. Por ahí tenés un pantalón que no da más pero que justo es de un color que pega bárbaro con otra cosa que no da más y todo el linyerismo junto tiene un sentido", dijo Molina.
En su cambio no solo está el aspecto físico. Juana Molina presenta a su nueva "familia" a riesgo de ser tratada como rara. La misma está compuesta por su manager y ex marido, Federico Mayol, la nueva mujer de él y el hijo de tres años que ambos tienen. Ellos, más Molina, comparten el espacio bajo un mismo techo.
Para finalizar y resumir su pensamiento, Molina dice: "Lo raro se volvió hermoso en algunos círculos. Cada vez más por suerte. Antes no se podía ser feo. Ahora no sé cómo es pero yo veo que muchas chicas que en mi época hubieran sufrido están muy tranquilas, muy cómodas, en la suya".
Lunes, 3 de febrero de 2014
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