Nueve médicos imputados En Corrientes hablan de una mafia dedicada al tráfico de órganos El defensor de la familia de Eduardo Ruíz Díaz (un joven al que se le extrajeron órganos) habló de "comunidad" y "corporación", apuntando al Cucaicor y reiteró que se trató de un homicidio. Están imputados 9 médicos y un policía.
El abogado de la familia Ruiz Díaz, Dr. Silvio Sosa, manifestó que en el caso por la polémica ablación “hay elementos parciales, los que tienen ellos porque no tienen acceso a la investigación fiscal”. Resaltó que por cuestiones de turno, quien entiende es el Juzgado Nº 3, a cargo del Dr. Luis Cochia Breard, pero dijo que “si esta él tendría que apartarse porque habría sido parte de los trámites, ya que dio la autorización”.
Expresó que “parece ser que después se intento subsanar con un informe posterior y esto importa responsabilidad jurídica”. Recordó que cuando Ruiz Díaz ingresa a la sala de emergencias del Hospital Escuela estaba acompañado de su planilla de derivación, donde se hallaba identificado con nombre, domicilio, el número de documento inconcluso y la edad. En este sentido, manifestó que “explicaciones pueden haber muchas, pero la responsabilidad no se sabe porque se desconoce la acusación”.
Resaltó que por lo que conoce, ya que no pudo acceder al expediente, estarían en curso de falsedad documental y falso testimonio. Agregó que “este tipo de ilegalidades se cometen como medio para cometer otros delitos u ocultar algo”. “Sostenemos que Eduardo Ruiz Díaz fue victima del delito de homicidio”, dijo y señaló que “a parte de ello, se asocia el delito económico organizado, donde seguramente nos vamos a encontrar con una mafia”.
“Acá se ve solamente la punta del iceberg”, dijo al hablar de “comunidad”, por no decir “corporación”. Agregó que “por ahora es un caso pero no podemos ser tuertos en nuestra mirada” y se preguntó “¿qué hubiera pasado si el hijo no se enteraba?, no hubiera pasado nada”.
LAS IRREGULARIDADES DEL CASO Con la autorización del juez de Instrucción Nº 3 Luis Cochia Breard el Cucaicor consiguió realizar la ablación de órganos. Tras la operación el cuerpo fue enterrado como NN en el cementerio del barrio Laguna Brava.
10 días después, Jorge Ruiz Díaz, hijo de la víctima, se enteró de lo ocurrido y radicó una denuncia donde aseveró que se robaron los órganos de su padre porque no era donante. Contó que pese a que las autoridades del hospital tenían los datos de identidad del paciente en el libro de registro de la sala de emergencia, nunca se preocuparon en dar cuenta de la muerte a los familiares. Al concurrir al nosocomio, el denunciante se enteró que su padre había fallecido, sometido a una ablación de órganos y enterrado como NN en un cementerio de la ciudad.
Fuente: Corrienteshoy y Diario Policial
Lunes, 19 de diciembre de 2011
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