Internacionales. Pese a la crisis, Obama cosecha apoyos en el crucial Ohio Como corazón industrial de EE.UU., Ohio es uno de los estados que más sufrió la terrible recesión de 2008-2009, pero también el mejor ejemplo de una lenta pero firme recuperación que constituye una excelente noticia para el presidente Barack Obama, que busca su reelección.
Para su rival republicano, Mitt Romney, que difícilmente llegue a la Casa Blanca sin ganar este estado decisivo, la remontada de Ohio no es de buen agüero. Todos recuerdan aquí que en 2009 se opuso al salvataje y estatización temporal de la industria automotriz, motor de la economía de Ohio, y no se lo perdonan. Lejos de aprobar la decisión de Obama de destinar 80.000 millones de dólares para salvar a General Motors y Chrysler, Romney, quien se hizo rico mandando empresas a la quiebra con su compañía Bain Capital, recetó una "bancarrota ordenada" que permitiera a las automotrices "resurgir" echando gente y ahorrando en pensiones. "La bancarrota que Romney prescribió es del tipo a la que se dedican los tiburones empresariales como él y como los de Bain Capital: llegar al lugar y arrancar la carne de los huesos", dijo a Télam Ken Lortz, uno de los líderes de United Auto Workers (UAW), quizá el sindicato más antiguo y poderoso del país. Esa `bancarrota ordenada` "habría permitido a las automotrices darle la espalda a sus obligaciones previsionales para con los trabajadores y jubilados, a su obligación de suministrar un seguro médico a esta gente y a las negociaciones colectivas de trabajo", agregó Lortz, jefe de la región 2-B de UAW, en Ohio. Sentado en una oficina de reinserción laboral en el centro de Cleveland, en el noreste de Ohio, Norman repasa una y otra vez sus papeles y su currículum de 40 años en distintos empleos, además de cocinero, mientras espera ser llamado para contar su caso. "Perdí mi trabajo en febrero pasado. Ahora tengo un contrato de empleo temporal hasta diciembre, así que estoy tratando de hallar algo antes de que termine ése", dijo Norman, un afroamericano robusto y de barba entrecana, con voz amable y pausada. "Me preocupa mi edad. Para encontrar trabajo tengo que competir con un montón de gente más joven y bien entrenada. Soy consciente de que no tengo ninguna educación formal, pero he sido cocinero los últimos 15 años y soy bastante bueno en lo que hago", agregó Norman en diálogo con Télam. La puerta de la oficina se abre y Anisha White sale con una reluciente sonrisa de oreja a oreja. Ya se registró en la base de datos, y ahora es optimista para conseguir empleo. "Estoy aquí en busca de un trabajo en una cadena de tiendas de ropa como asistente de ventas. El 4 de octubre pasado perdí mi trabajo de cajera y repositora en un supermercado luego de un año y cuatro meses como empleada", relató Anisha, cuya familia está compuesta por sus padres y cuatro hermanos, todos con trabajo. La crisis que comenzó en 2008 arrasó con más de 400.000 puestos de trabajo en Ohio, de los cuales hasta ahora sólo se recuperaron unos 200.000, contó a Télam la economista Amy Hanauer, directora ejecutiva de Policy Matters Ohio, uno de los "think tank" (centro de estudios) más prestigiosos del estado. Hanauer explicó que las cosas ahora comenzaron a mejorar un poco, sobre todo gracias al rescate de la industria automotriz. "Los puestos de trabajo industriales, de producción de bienes duraderos, crecieron tres veces más rápido que otros tipos de empleos en nuestra economía (la de Ohio) desde el punto más bajo al que habían llegado en 2008-2009. Esto reactivó el consumo y a su vez las contrataciones en otros rubros", prosiguió. El desempleo en Ohio, de hecho, cayó en septiembre a un 7%, por debajo del nacional, que está en 7,8%, algo que la economista definió como "muy buenas noticias para Obama", que también necesita ganar en el crucial Ohio para conservar su puesto. "Igual la situación es muy complicada, en particular para los trabajadores, los afroamericanos y otras minorías", agregó. Romney afirma que el intervencionismo de Obama y sus medidas de estímulo son los grandes responsables de que la economía no despegue y no se creen los puestos de trabajo que Ohio y el país necesita, y que él, un empresario exitoso que hizo millones, tiene la experiencia y la fórmula para salir del pantano. Norman y Anisha, quienes ya votaron por anticipado, no se la creen. Norman es cocinero y perdió su trabajo por la crisis económica que asuela a Estados Unidos. Su caso reproduce el de millones de compatriotas, aunque sus 62 años le hacen temer que quizás sea ya demasiado tarde para hallar otro empleo. Anisha, otra residente de Cleveland, Ohio, está más esperanzada: tiene 28 años y confía en que, con toda una vida por delante, podrá reinsertarse en el mercado laboral, pagar sus deudas y devolver a sus humildes padres afroamericanos la ayuda que le están prestando desde que fue cesanteada el mes pasado. "Voté por Obama. Hizo lo mejor que pudo y bajo circunstancias terribles. Cuando fue electo dijo claramente que llevaría más de cuatro años arreglar el desastre que heredó", dijo Anisha. "No creo que Romney quiera ayudarme. Creo que quiere ayudar a los poderosos y ricos, y que los pobres de defiendan como puedan", agregó. Para Norman, Obama, como presidente, no tiene "superpoderes" que le permitan resolver los problemas con una varita mágica, y que necesita la colaboración del Congreso y las demás instituciones del gobierno para sacar el país adelante. Obama "heredó una situación que no le desearía a nadie. Cuatro años con los republicanos oponiéndose a todo lo que propuso no es suficiente. Las cosas están yendo progresivamente mejor, lentamente mejor", dijo. "Tampoco culpo a Romney de mi situación. Quizás tenga buenas intenciones, pero sus planes no tienen en cuenta a gente como yo, y realmente no pienso que porque hayas hecho millones de dólares vayas a sanear un país como se sanea una empresa. Un país es un país, no una empresa", concluyó.
Fuente: Télam
Jueves, 1 de noviembre de 2012
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