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Deportes Caruso Lombardi-Tinelli, crónica de un "matrimonio por conveniencia" que está llegando a su incuestionable final  Allá por los primeros días de abril, cuando San Lorenzo perdió 2 a 0 ante Vélez por la Fecha 8 del pasado Torneo Clausura y se quedó sin entrenador por la salida de Leonardo Madelón, el famoso conductor televisivo fue uno de los que aportó en la importante 'vaquita' que se llevó a cabo entre varios personajes para 'comprarle el pase' del DT a Quilmes.
No lo soportan más, ni más ni menos que eso. La unión entre San Lorenzo y Ricardo Caruso Lombardi está en su punto más crítico y los 'contra' del entrenador ya comienzan a vaticinar cuándo será el fin del vínculo entre el excéntrico personaje que actualmente sigue vistiendo el buzo y el "Ciclón". A pesar de que entre abril y fines de septiembre no transcurrió tanto tiempo, lo cierto es que varios episodios que se fueron sucediendo con el paso de los días desgastaron la relación y la pusieron en 'jaque'.
Cuando San Lorenzo perdió 2-0 con Vélez el 1° de abril por la Fecha 8 del pasado Torneo Clausura, Leonardo Madelón no resistió la incómoda posición en la tabla de los promedios, de ninguna manera podía hallar el equipo ideal para salir adelante y encima el vestuario era un polvorín, con acusaciones de 'haber ido a menos' entre los propios jugadores. ¿Quién iba a querer asumir en un club que se caía a pedazos, se prendía fuego y caminaba por la cornisa del segundo descenso de su historia?
Y allí lo fueron a buscar a él. Con extensos pergaminos de 'bombero' para levantar a conjuntos en emergencias deportivas, no tuvo miedo ante el desafío y se hizo cargo del plantel después de un raid mediático impresionante y de una inversión más que importante por parte de los de Boedo que, ante la imposibilidad de aportar el dinero desde sus arcas, acudieron a varios allegados para juntar los dólares que permitieran el desembarco del "salvador". Y entre los solidarios estuvo Marcelo Tinelli, de acuerdo con su llegada.
A los pocos días de su asunción, cambió la moral de todos y el cuadro "azulgrana" rescató un interesante 1-1 en el clásico con Racing. Después goleó a Godoy Cruz, se le escapó la victoria con Banfield y superó con claridad a Arsenal. Era un verdadero cuento de hadas. San Lorenzo sumaba y él llevaba a la práctica su cometido con asombrosa facilidad. Pero vinieron los empates ante All Boys y Olimpo, para después ser seguidos por la durísima caída con Unión. Previamente, un escandaloso 'acting' en las calles de la ciudad con Fabián García, ex ayudante de Madelón, con quien se peleó a golpes de puño.
La increíble victoria sobre Newell´s fue una bocanada de aire necesaria, pero la caída en la cancha de Tigre complicó los planes y ni hablar la igualdad sin goles ante Independiente (más la goleada de Atlético Rafaela sobre Racing). Ese día, el club estaba entre el descenso directo y la Promoción. No había manera de zafar de todo. Venció a San Martín de San Juan tras arrancar perdiendo y festejó con locura los goles de Colón a Banfield, que mandaron a la 'B' a los del Sur después de una campaña peupérrima.
La Reválida fue más sencilla de lo esperado y con triunfo en Córdoba (con un planteo extraño y conservador, pero con el que acertó) más un empate con algo de sufrimiento en casa, consiguió el objetivo que parecía impensado de seguir en la elite del fútbol argentino.
Finalizada la temporada, la institución era esclava de un caos en todos los sentidos y la presión popular sacó a Carlos Abdo del sillón presidencial. Cuando no había rumbo, futbolistas ni una línea a seguir, Caruso salía por todos los medios contagiando fe, pidiendo tranquilidad y hasta empezando a armar el plantel por su cuenta con hombres del ascenso, tal cual fue siempre su costumbre.
Pero cuando la dupla Matías Lammens y Marcelo Tinelli ganó las elecciones legítimamente con un 80% de los votos, ya nada fue igual. Si bien respaldaron la gestión del director técnico y lo confirmaron en el cargo para el Torneo Inicial, se supo que nunca fue del agrado de ambos por identidad e ideologías futbolísticas. Menos que menos en cuanto a personalidad y modos de manejarse en la vida. Y estas últimas cuestiones, poco a poco, fueron destruyendo una relación que siempre pareció poco armónica.
Algunos choques a la hora del armado del equipo (más que nada cuando se barajó la posibilidad de sumar a Diego Buonanotte), un pedido de bajar la exposición mediática que duró verdaderamente muy poco y mil polémicas que se tejieron en el tiempo, fueron golpes bajos para los hombres de decisiones fuertes en el Gobierno. Quienes, a su vez, sufrieron y se disgustaron con los resultados de las primeras fechas, los planteos mezquinos, sus cortocircuitos con jugadores, las internas del vestuario y las imágenes papelonescas, como por ejemplo, las quejas a Néstor Pitana post derrota con Newell´s. Hasta el hijo de MT lo crucificó por Twitter sin nombrarlo ("Es un gordo impresentable"), sus dirigidos se le rebelan por los dibujos tácticos y el amarretismo y el último sábado declaró en contra de la hinchada... Demasiados argumentos que molestan.
Pero Caruso jamás entendió que la idea primordial de Tinelli y compañía era la de apaciguar las aguas y sus diferencias con algunos sectores del periodismo se acentuaron muchísimo en las últimas horas. "A uno sería importante pisarlo con el auto y hacerle doler todos los huesos", dijo. Fue la gota que rebasó el vaso: los dirigentes se sintieron decepcionados, avergonzados y desilusionados por unas declaraciones que poco tenían que ver con lo que ellos pregonaban.
Para colmo de males, lo presionaron públicamente para que pidiera disculpas y le volvieron a advertir que no hablara más. ¿Cómo reaccionó el entrenador? Se desentendió de los pedidos de sus jefes, no se hizo cargo, no bajó los decibeles y volvió a salir en vivo por cuanta radio quisiera sacarlo al aire. Claros síntomas de rebeldía porque el DT sabe que ya no cuenta con el respaldo de los directivos y que está seriamente cuestionado por muchos hinchas. ¿Está forzando su salida?
Lo cierto es que, a pesar de que trascendieron como razones para trabar el despido la exorbitante suma de dinero que le tendrían que abonar en concepto de indemnización (incluye un suculento premio por haber mantenido la categoría, tiene contrato hasta junio de 2013) y que no sea la línea de estas autoridades interrumpir contratos, no lo aguantan más. Todo lo que pasó, fue más que suficiente para pensar en un reemplazo y allí ya navegan los nombres de Marcelo Gallardo y Edgardo Bauza.
Encima, la zona de descenso acecha nuevamente por los malos réditos en los últimos compromisos del campeonato y la impaciencia se apoderó de los simpatizantes, quienes esperaban pelear arriba, y también de Tinelli, que puso mucho capital para conformar un plantel que por el momento no arranca. Para colmo, se viene un examen durísimo ante Racing y una derrota más terminaría de caldear los ánimos por completo.
Las cartas están echadas y el principio del fin estuvo a la vista de todos. Todo parece indicar que la continuidad del técnico está en manos de los jugadores y la obtención de victorias que restablezcan la tranquilidad en el corto plazo. Pero el bozal legal que le impuso la dirigencia fue una muestra de la intolerancia hacia las actitudes y manejo del líder del cuerpo técnico.
Fuente: Playfutbol
Jueves, 27 de septiembre de 2012
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