Torneo Clausura Boca y "El Rojo", un clásico que con el tiempo se fue tornando azul y oro  El duelo, uno de los más importantes de la Argentina, supo ser de Independiente, quien llegó a estar 14 partidos arriba. Pero a partir del 2003, la historia cambió y ahora es "El Xeneize" el que manda en el historial. Ya sacó seis juegos de diferencia
El clásico entre Boca e Independiente era cosa juzgada, dicen los hinchas de antes, los que peinan canas y supieron vivir la gloria de uno y las miserias del otro. El partido más importante (o uno de los más) que tiene el fútbol argentino después del Superclásico, era puramente rojo. El equipo de Avellaneda supo estar 14 partidos por encima de su rival, pero todo cambió.
A partir de 2003, y tras el torneo de los torneos cortos, donde se disputaron 43 partidos con 20 triunfos de Boca y apenas ocho de Independiente, se dio el cambio. Primero fue en 2001, cuando en una mañana soleada en La Bombonera, “El Xeneize” venció 5-3 al “Rojo” y lo alcanzó en el historial. Luego vinieron dos empates 1-1 en 2002, entre ellos el recordado partido del gol de Lucas Pusineri, y en el primer juego del año siguiente, el equipo dirigido en ese entonces por Carlos Bianchi, pintó el clásico de azul y oro con un 3-1, con tantos de Miguel Caneo, José María Calvo y Héctor Bracamonte.
A partir de allí, Boca ganó nueve partidos contra sólo dos de Independiente, que se quedó con el clásico en tres oportunidades: 2-1 en la Doble Visera en el Apertura 2004; 2-0 en el Ducó en el Clausura 2009 y 2-1 en La Bombonera en el Apertura del mismo año. Ese fue justamente el último triunfo del “Rojo” en La Boca, cuando era dirigido por Américo Gallego, quien está muy cerca de retornar a Avellaneda.
En tanto, la última victoria “Xeneize” en su cancha ante Independiente, quedó lejana: fue en 2006, cuando con gol de Matías Silvestre de Cabeza, Boca se impuso por 1-0. Sí, hace casi siete años que los de La Ribera no le ganan al “Rojo” como locales. El domingo, irán por dos objetivos: volver al triunfo y estirar la racha, mientras que de la vereda de enfrente, la ilusión no se queda atrás: buscarán el primer triunfo del torneo y achicar la brecha con su histórico rival.
Viernes, 9 de marzo de 2012
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